Main Menu

Periodismo de soluciones

Read Carefully

Contar la historia completa: no sólo problemas, sino lo que otros están haciendo para corregirlos.

Si bien este enfoque no es una novedad, especialistas y editores coinciden que en las redacciones, todavía no se ejerce lo suficiente. El Periodismo de Soluciones (PdS) y como su nombre lo anticipa, consiste en una forma de abordar el relato haciendo hincapié en las soluciones, en lugar de a los problemas en sí. No son noticias de última hora, pero su difusión es de gran utilidad para la sociedad. Sus detractores alegan que se trata de “noticias positivas” que acarrean riesgos como pérdida de objetividad. ¿Qué sucede verdaderamente en la práctica? En este mitos y verdades los pro y contras de esta nueva fiolosofía que en la actualidad está tomando cada vez más notoriedad.

Se trata de incluir recomendaciones de los periodistas frente a las problemáticas que reportan: Falso

No tiene que ver con recomendaciones, ni con activismo y mucho menos con relaciones públicas. Según indican desde la Red del Periodismo de Soluciones (SJN, por sus siglas en inglés), este enfoque se define como “la cobertura de las respuestas a los problemas sociales realizada de manera cautivante y minuciosa, una cobertura que sigue los más altos estándares periodísticos”. Por eso, a la hora de redactar un artículo de PdS, mediante la investigación, se ahonda en iniciativas en ejecución que apuntan hacia esas mismas situaciones adversas. Así, la narrativa es impulsada por poner a la vista modelos exitosos y describir su funcionamiento en la práctica.

El periodismo de soluciones tiene un impacto real: Verdadero

Uno de sus principales impactos tiene que ver con su efectividad para instalar temáticas y promover el debáte público. El foco se corre de las acusaciones hacia la generación de conversaciones más productivas y menos divisivas. De este modo también, se logra desmantelar los argumentos de las autoridades o responsables de los problemas tales como: “esto siempre ha sido así” o “resolver esto es muy difícil”. “Esto realmente enriquece la capacidad de diálogo constructivo de nuestras sociedades, que es algo que creemos se ha perdido mucho en estas épocas de polarización. Hoy, cuando hay debates complejos es muy fácil que se simplifiquen en malo o bueno, blanco o negro”, decía en una entrevista para este medio, Alejandra Cruz, directora del área de Taller de Periodismo de la Fundación Gabriel García Márquez para el nuevo Periodismo Iberoamericano, entidad que promueve el PdS en la región.

A través de estas historias, el lector se involucra más: Verdadero

“Una de las razones por las que alguien deja de leer noticias es porque son negativas, no quiere saber únicamente lo que se está haciendo mal, sino conocer cómo van a arreglarlo”, explica Tina Rosenberg, cofundadora de la SJN en la página web institucional. Según explican allí, basado en investigaciones realizadas con el Proyecto Noticias Cautivantes. El interés que causa este tipo de relato periodístico vuelve menos apáticos a los lectores u oyentes. Además, trascender el enfoque negativo hacia alternativas de respuestas exitosas, genera más conocimiento para la sociedad.

Para los periodistas, implica reformular algunas definiciones propias de su profesión: Verdadero.

Al decidir cubrir este tipo de historias, la tarea diaria de los periodistas y el funcionamiento en las redacciones se ve modificada. En principio, tal como explican desde la SJN, cambia la manera de entender la actividad y sus implicancias y así lo grafican: “La vieja forma de pensar: si cubrimos las soluciones, podríamos poner en peligro nuestro profesionalismo. La nueva forma de pensar: si no cubrimos las soluciones, ponemos en peligro nuestro profesionalismo”. Al inicio puede ser confuso y en las redacciones puede ser mal interpretado como “buenas noticias”, pero revelar las infracciones no es la única forma de lograr impacto. De allí, que se lo conoce bajo la premisa de “contar la historia completa”. De este modo, el relato se vuelve más preciso y completo.

Top