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Juntas por la paridad

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La Confederación Argentina de Mutualidades (CAM) y su comisión de Equidad y Genero

La dirigencia argentina, en todos sus sectores, aún hoy tiene una deuda con las mujeres ya que su representación tanto en la política, como en los sindicatos, las compañías, las cámaras empresariales sigue siendo bajo y dominada mayoritariamente por hombres.

Con esto en claro, desde hace dos años la Confederación Argentina de Mutualidades (CAM) creó la Comisión de Equidad de Género para abordar este tema y lograr una mayor presencia femenina.

Nora Landart, coordinadora general de esta área, y a su vez presidenta de la mutual Arturo Oñativia de Villa María, Córdoba y coordinadora de la Comisión de Mujeres de FEMUCOR, explica que se creó el 8 de marzo de 2016, con amplia representación: 18 provincias. “Nos movilizaba y nos moviliza fundamentalmente el incrementar la participación de las mujeres en espacios de decisión, como ya lo habíamos hecho en la Federación cordobesa en el marco de foros promovidos por INAE durante el gobierno anterior. En aquél momento, las mujeres de FEMUCOR llevamos al Congreso, la propuesta de inclusión en el proyecto de ley que se ponía en discusión para la participación equitativa de género. Así, cuando nos constituimos como Comisión Nacional, este fue uno de los objetivos iniciales” detalla.

La comisión divide su labor en distintas áreas: política, de la cual depende el Observatorio de equidad de género, (ver recuadro), social, educativa, salud, economía social.

Logros para destacar

Al hablar de objetivos cumplidos Landart menciona el haber podido sostener e incluso aumentar en cantidad de participantes, los encuentros anuales de mujeres. Estas reuniones buscan debatir sobre la manera de democratizar la economía social y solidaria, como también, reflexionar, evaluar objetivos y proponer nuevas metas. “Hemos desarrollado canales de participación genuina de mujeres”, enfatiza.

Otro de los logros de la nueva comisión nacional es que ha tenido réplicas provinciales. Así, a Córdoba, que fue pionera se le sumaron Santa Fe, Entre Ríos, La Pampa, Chubut, Río Negro, Santa Cruz y Neuquén, además de un desarrollo incipiente con participación genuina en San Juan, e intentando avanzar en Formosa y otros distritos.

Tratamos de articular con otros grupos sociales que estén trabajando en la temática para elaborar propuestas, capacitaciones y así perforar la agenda pública.

También señala el haber ido al Congreso de la Nación para pedir que se legisle en relación a la paridad y solicitar acciones positivas para avanzar en la representatividad.

Por otro lado, destaca un fuerte trabajo en la visibilidad de toda la actividad mutual al “interior de nuestras realidades, de mujeres, niños y adolescentes, de la problemática de la mujer, del abordaje de la violencia de género promoviendo en nuestras mutuales y comunidades foros de discusión, asambleas diarias, mediante la formulación de políticas públicas presentadas a autoridades locales”, señala.

Pudieron así hacer que Villa María, en Córdoba, fuera la primera ciudad del país en declarar la emergencia en violencia de género, y tener de esto modo, todo un plan de asistencia, contención y distribución de recursos a las víctimas para fortalecer su autonomía en la toma de decisión. “Y este año estamos trabajando fuertemente en la capacitación y sensibilización para la reeducación de varones que ejercen violencia en la pareja, porque tenemos una entidad mutual, Grupo Buenos Aires, con sede en CABA que aborda especialmente esta temática. Así estamos llevando este modelo a las distintas provincias donde contamos con comisiones de mujer o de equidad de género según dominación”, aclara. Pero lo esencial pasa por “incidir en políticas públicas y en tema de asistencia de varones, presentamos en el Congreso a través de la diputada Soledad Carrizo para que la ley de protección a las mujeres contra la violencia de genero amplíe su articulado para encarar la reeducación de los hombres o victimarios. Todo lo que hacemos comunitariamente tratamos de articular con otros grupos sociales que estén trabajando en la temática para elaborar propuestas, capacitaciones y así perforar la agenda pública”, concluye.

Hoy el eje de las preocupaciones pasa, fundamentalmente, por discutir la economía política, sin desatender la búsqueda de una mayor paridad y presencia femenina.

Pero las temáticas no son sólo exclusivamente femeninas. Todas las mujeres mutualistas se cargaron sobre sus hombros, junto con el resto de los dirigentes, la defensa del sector cuando el gobierno nacional impulsó la reforma tributaria que pretendía gravar con ganancias a nuestras mutuales. “Estuvimos de nuevo en el Congreso dando cuenta de la función social y política que tienen las entidades mutuales en nuestras comunidades. Y cuando digo política me refiero a lo decisivas que son nuestras entidades en la transformación de la realidad de nuestros pueblos”, dice Landart.

Por otra parte, para sumar fuerza, la Comisión establece una comunicación permanente con sus colegas cooperativistas y, desde el año pasado, están construyendo una agenda en común cuando las condiciones lo permiten. “Ellas han participado en nuestro encuentro anual en La Pampa y, nosotras el hecho de que su proyecto de cupo haya progresado en el Congreso, lo hemos celebrado como propio. Esto muestra que somos capaces de pensarnos como un todo, como un colectivo de la economía social y solidaria”, afirma Landart.

En cuanto a la evolución de su tarea, lo primero que encararon fue reflexionar sobres sus prácticas para crear mayor conciencia de género. Pero hoy el eje de las preocupaciones pasa, fundamentalmente, por discutir la economía política, sin desatender la búsqueda de una mayor paridad y presencia femenina.

Conociendo por dentro

La Confederación Argentina de Mutuales (CAM) nació hace 66 años y nuclea un abanico amplio de 38 federaciones que representan a unas 4 mil entidades de base, es decir, mutuales de servicios entre ellos: servicios de salud, emergencias médicas, farmacias, consumo, educación, promoción educativa-deportiva-cultural, turismo, ayuda económica, vivienda, subsidios, servicios fúnebres, panteones, jardines maternales, guarderías infantil, bibliotecas entre otros rubros que hacen a la vida cotidiana de más de 5 millones de argentinos. Junto al sector cooperativo abrigan desde la economía solidaria a más 16 millones de personas.

Además, junto con las confederaciones hermanas de cooperativas y mutuales y en alianza con el Estado a través del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES), desarrolla políticas integrales hacia adentro y hacia afuera del sector. Integra también AMA (Alianza del Mutualismo de América) y AIM (Asociación Internacional de la Mutualidad).

 

Para medir y evaluar

La Confederación Argentina de Mutuales cuenta con un Observatorio de Equidad de Género, el cual ha realizado la primera encuesta al interior de las mutuales representadas en CAM y ahora está encarando una segunda encuesta junto con Fundación Observatorio de Responsabilidad Social para evaluar cuánto se ha podido avanzar en la construcción de igualdad.

Esta alianza tiene relación con el Programa Piloto de “Implementación de los Indicadores de Genero para Organizaciones” creado por FORS, que busca medir la situación de igualdad de género en el ámbito de las organizaciones que conforman la CAM en torno a determinar la autonomía física, económica y en la toma de decisiones como ejes de análisis.

A su vez, por medio de un acuerdo entre CAM y EduFORS se pusieron en marcha cursos a distancia destinados a profesionalizar la actividad mutualista, con especial foco en la Responsabilidad Social (RS).

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